La adopción nacional es una medida subsidiaria de protección a la infancia que proporciona una familia definitiva a menores que no pueden permanecer en su familia de origen.
El objetivo de la adopción nacional, como el de todas las adopciones, es garantizar el derecho de todo niño/a a desarrollarse integralmente en una familia normalizada, anteponiéndose el interés superior del menor a cualquier otro interés legítimo concurrente.
Los niños/as susceptibles de ser adoptados se pueden encontrar en diferentes situaciones:
Cuando sus padres han consentido la adopción.
Cuando se trata de un niño huérfano o cuya filiación es desconocida.
Cuando los padres están privados de la patria potestad por decisión judicial o se encuentran incursos en causa de privación de ella.